BERTOLT BRECHT
Primero vinieron a por los comunistas,
y yo no dije nada por que yo no era un comunista.
Luego se llevaron a los judíos,
y no dije nada porque yo no era un judío.
Luego vinieron por los obreros,
y no dije nada porque no era ni obrero ni sindicalista.
Luego se metieron con los católicos,
y no dije nada porque yo era protestante.
Y cuando finalmente vinieron por mí,no quedaba nadie para protestar
Primero vinieron a por los comunistas,
y yo no dije nada por que yo no era un comunista.
Luego se llevaron a los judíos,
y no dije nada porque yo no era un judío.
Luego vinieron por los obreros,
y no dije nada porque no era ni obrero ni sindicalista.
Luego se metieron con los católicos,
y no dije nada porque yo era protestante.
Y cuando finalmente vinieron por mí,no quedaba nadie para protestar
1 comentario:
A veces la indiferencia cubre nuestros ojos con la venda del miedo.
a veces la impotencia se hace amarga... pero callamos. Es difícil no escuchar los gritos del silencio que claman por la vida. Tal vez la cobardía, el miedo o el temor, sólo sean un pretexto para seguir viviendo tras nuestras propias sombras. Un saludo Carmen, y gracias por tus atentos comentarios en el blog de Brétema.
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